Este año mis papis han coincidido menos días de lo habitual en verano por lo que las vacaciones en familia han sido algo más cortas. Cortas pero intensas!
Hemos empezado nuestra andadura estival por el pueblo de la yaya y allí me he reencontrado con mis amiguitos Abel, Haizea, Carla y Oscar (el año que viene, Oscar ya andará por lo que seremos otro terremoto más por las callejuelas del pueblo) . Cada año somos más en la colla y aunque ahora, la verdad, vamos cada uno un poco a nuestra bola, nuestros papis intentan que hagamos cosas juntos, como p.e ir a la pisci del pueblo. Qué guay nos lo hemos pasado, con nuestros manguitos, flotadores y otros utensilios varios para permanecer a flote nos hemos divertido un montón.
Las fiestas han sido varios días en los que nos ha dado tiempo a disfrutar de los castillos hinchables, de las noches locas en las terrazas, el vermouth al mediodía y la visita propia de la familia.
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